Les recomiendo escuchar esta hermosa canción: "La Samaritana" del sacerdote Juan Ignacio Pacheco. En ella se cuenta el encuentro de una mujer con el Señor Jesús, quien con su sola mirada logra entrar hasta lo más profundo de su alma. Luego Él nos invita a beber del agua que brota de su Espíritu, que sacia toda nuestra sed. El nos puede dar dar el Agua que da vida. Bendiciones!
Letra de la Canción:
Llegaste tan de pronto,
Misterio de amor,
Tus ojos negros calaron hondo;
Y habitaron oscuros lados,
De mi cuerpo herido,
Y tu luz me asombró, tu luz.
Dame de beber,
Tú me dijiste,
Al tiempo de mil latidos de mi corazón.
Si supieras el don de Dios,
Y quien te lo pide,
Tu vendrías a buscar mi agua.
Porque todo el que beba,
Del agua que yo le dé,
Tendrá vida, no tendrá sed.
Porque todo el que beba,
De la fuente de Mi Vida,
Limpiará sus heridas,
No tendrá sed.
El agua que Tú me das,
Llena mi pozo vacío,
Es agua de tu Espíritu en mi corazón,
Colma todos mis cántaros,
Hechos de barro,
Y tu viento de amor me envuelve,
El agua que Tú me das,
Lava lo manchado,
Hace brotar del mal un bien,
Tu fuego quemó mis labios,
Y me lancé a correr,
Tu nombre gritaré, cantaré.
Porque todo el que beba,
Del agua que yo le dé,
Tendrá vida, no tendrá sed.
Porque todo el que beba,
De la fuente de Mi Vida,
Limpiará sus heridas,
No tendrá sed.
Porque todo el que beba,
Del agua que yo le dé,
Tendrá vida, no tendrá sed.
Porque todo el que beba,
De la fuente de Mi Vida,
Limpiará sus heridas,
No tendrá sed.
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